El cuerpo humano fabrica ínfimas cantidades de Ácido Lipoico. El resto debe obtenerse de la dieta. Las fuentes más ricas en Ácido Lipoico son órganos de animales como el hígado, corazón y vísceras. 

También lo contiene la carne de ternera alimentada con pastos (lo que hoy en día resulta difícil de conseguir, dado que la mayor parte del ganado se alimenta con soja transgénica).

Otra pega es que, aunque algunos alimentos sean ricos en Ácido Lipoico, éste se encuentra unido al aminoácido lisina. Y, puesto que las enzimas digestivas no pueden romper dicho enlace, su biodisponibilidad es muy baja.

Existen 2 formas de Ácido Lipoico (denominadas isómeros). 

El isómero R es el mismo que fabrica el cuerpo, mientras que la forma S se obtiene de forma sintética en un laboratorio. La forma R es la responsable de los beneficios antiinflamatorios y antioxidantes del Ácido Lipoico, siendo la forma más potente y estable.

La mayoría de los suplementos de Ácido Lipoico contienen una mezcla de ambos isómeros, ya que el proceso de separar ambas moléculas es caro y no interesa a los fabricantes. Los suplementos que contienen 100% R-Lipoico son más efectivos y permiten obtener beneficios con dosis más bajas.

Si el suplemento de Ácido Lipoico que tomas no especifica el isómero, entonces es seguro que contiene ambas formas (R y S), presente en la mayoría de suplementos.

La palabra "liposomal" significa que el Ácido Lipoico ha sido encapsulado en fosfolípidos por medio de un sofisticado proceso tecnológico. 

Los fosfolípidos son el mismo material del cual están hechas las paredes de nuestras células, lo que permite una absorción de nutrientes cercana al 100%.

Justo después de tomar una dosis de Ácido Lipoico liposomal, millones de microscópicos liposomas cargados de R-Lipoico acceden al torrente sanguíneo donde se distribuyen ampliamente por TODO el cuerpo y son fácilmente asimilados por las células.

Los metales pesados son tóxicos que se encuentran por doquier a nuestro alrededor y se acumulan en el cuerpo causando estragos y propiciando todo tipo de enfermedades. Dado que resulta imposible evitar su exposición, la única forma de mitigar su impacto sobre nuestra salud es a través de desintoxicaciones periódicas.

Las intoxicaciones lentas y paulatinas por metales pesados, son más frecuentes que las intoxicaciones agudas, pero los múltiples y muy dañinos efectos que causan en el cuerpo raramente son evaluados por los profesionales de la salud. 

El Ácido Lipoico realiza la quelación (es decir, atrapa y prepara para la eliminación) de metales pesados. También ayuda al hígado a desintoxicar sustancias tóxicas, potencialmente mortales. A todo el mundo le beneficiaría tomar al menos 100 mg al día. 

Durante una limpieza de metales pesados es recomendable tomar suficiente Selenio y Vitamina C, ya que hacen que los glóbulos blancos (responsables de la eliminación de tóxicos) funcionen mejor. 

También es recomendable limpiar los riñones con Zeolita durante 1 mes antes de la quelación con Ácido Lipoico y, al terminar, repetir otro mes con Zeolita.

Se recomienda hacer ciclos con Ácido Lipoico una vez al año, de 1 a 3 meses, para eliminar metales pesados y mejorar las condiciones del hígado. Si tenemos toxicidad alta por metales pesados se necesita un tratamiento mucho más largos, de hasta 2 años.

El Ácido Lipoico, junto con el DMSA, son los dos únicos queladores que recomienda el Dr. Andy Cutler para eliminar el mercurio. El Dr. Cutler divide su protocolo en 2 etapas. El Ácido Lipoico se utiliza en la segunda etapa, en la liberación de los depósitos lentos.

El Ácido Lipoico elimina mejor el mercurio que el popular quelador EDTA.

La dosis recomendada para eliminar el mercurio es 1 sobre cada 12 horas.

Muchos estudios han demostrado que cuando se añade Ácido Lipoico a la dieta de personas con diabetes tipo 2 se incrementa de forma significativa el uso de la glucosa. 

Como resultado, se produce un aumento de energía y una disminución de la acumulación de grasa corporal.

Los estudios han demostrado que el Ácido Lipoico es útil para reducir el dolor, la sensación de quemazón, enrojecimiento, debilidad y calambres que provoca la neuropatía periférica. 

Tengas o no diabetes, no olvides tomar un sobre de Ácido Lipoico cuando te hayas excedido con el azúcar debido alguna fecha señalada o celebración. 

El Ácido Lipoico es un suplemento ideal para deportistas y quienes entrenan en el gimnasio, ya que permite desarrollar músculo con mayor rapidez a la vez que ayuda a perder grasa subcutánea. 

El Ácido Lipoico mejora el transporte de nutrientes a los músculos, desintoxica el organismo de metales pesados y potencia los antioxidantes.

Si tomas Vitamina C o Glutatión, plantéate añadir Ácido Lipoico para potenciar sus efectos. El Ácido Lipoico tiene la propiedad única de rescatar estos antioxidantes y “devolverlos a la vida” por más tiempo, de modo que el cuerpo no se queda sin.